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lunes, 29 de enero de 2018

THE VELVET ON THE RIVER




The Velvet escribieron y tocaron una música triste,
cuando los escucho pienso en gente muerta,
seres maravillosos que hablaban con los árboles
y que fueron puertas para mi corazón,
amantes con pájaros azules sobre sus hombros,
amigos que caminaron por el filo de la navaja
y a los que ya no volveré a ver.

It’s so cold in Alaska,

canto sobre el Shivanand Jhula bridge,
el mismo puente que cruzaron los Beatles en 1968
para encontrarse con el Maharishi Mahesh Yogui,

y aunque a mí nadie me espera

también yo cruzo sobre el Ganges
para escuchar las enseñanzas de este río
que me trajo a Rishikesh
para recordarme que sabiendo que soy
un huésped del instante
cómo es posible que lleve
la complicada vida que he arrastrado hasta aquí.

Ni todo se puede leer,
ni todo se puede comprender,
me dicen sus aguas.

¿Qué comes, arroz o ilusiones?,
brama la corriente.

Despierto del trance
rodeado por un rebaño de ovejas
y el rugido del río que me dice

sigue mezclándote,
sigue diluyéndote,
sigue disolviéndote,

olvídate de ti.

It’s so cold in Alaska,
It’s so cold in Alaska,
It’s so cold in Alaska…


Antonio Orihuela. Esperar Sentado. Ed. Ruleta Rusa, 2017
Fotografía de Ambar Past

3 comentarios:

  1. Me encanta Antonio, dejemos que nos hablen los árboles y los ríos. Gracias por la claridad y la fuerza de lo sencillo. Abrazos hermano!!

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Gracias Luis, pongamos la oreja sobre el corazón de la tierra, antes de que se canse de nosotros y deje de hablarnos al oído... un abrazo fraterno!!

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