Páginas

viernes, 9 de agosto de 2024

5 poemas de LA PRIMERA VEZ QUE DIJE "AGUA" de JOSÉ MARÍA GARCÍA LINARES

 



 

NARANJOS EN EL PARQUE

 

 

En el parque los naranjos

 

florecen a la sombra de los niños

Sus raíces echan flores en las fuentes

 

y el olor a azahar exprime el jugo de la vida

 

en los umbrales luminosos del verano

 

 

Corre la edad montada en bicicleta y los laureles

 

respiran la emoción del mes de mayo

 

umbrosos

 

frescos

 

sabios

 

melancólicos

 

 

La niña chupa con afán su piruleta

 

un rojo corazón de transparencia diamantina

 

y sueña con un reino de unicornios

 

con palacios donde viven sus abuelos muertos

 

donde suenan cada hora

 

las canciones preferidas de los magos

 

Dos jóvenes se besan en un banco

 

el vuelo de la vida en las palmeras

 

parece dibujar el porvenir en cada labio

 

 

las manos alfareras con las que inventar las horas

 

con las que esculpir el rostro en carne viva del deseo

 

y estallan los rosales como un mar enfurecido

 

aroma a primavera y caracolas

 

Bañada en el azul gobierna la araucaria

 

el divagar ventoso del recuerdo

 

No sé si lo que escribo

 es una rama que se mece

 

del hoy hacia el ayer en el mañana

 

o es quizás savia profunda efervescente

 

llama de mí                                                                verbo inefable

 

verso imposible en la frontera de la luz

 

casa en que descansa la mirada

 

y sorbe brisa y voces y araucarias

 

En el parque los naranjos

 

los laureles

 

las fuentes claras donde fluye la memoria

 

leen mi vida en las marchitas hojas de mis ojos

 

pupila azul donde reposa el tiempo

 

 


 

FÉRTIL MEMORIA

 

Decir azul

 

para beber del tiempo la palabra

 

que me dice                que me salva               que te llama

 

La ciudad azul

 

la voz azul

 

la madre azul

 

Azul la flecha que traspasa la mirada

 

y deja en la garganta

 

el rastro de aquel cielo bañado en la bahía

 

 

Parece que fue ayer                pero es mañana

 

Allí aprendí la lógica del mar

 

su norma

 

su castigo

 

su escritura

 

sobre el cuerpo bendecido de la tarde

 

 

Azul el corazón

 

 que late en la memoria de mis manos

 

su sangre transparente como el sol de la palmera

 

cargada de alimento               de sed            y          acantilado

 

Las aguas claras rompen su hermosura

 

a orillas de esta vida azul que extraigo

Ardientes yacimientos bajo un suelo

 

de lenguas automáticas y grises

 

Fluye a borbotones

 

                        géiser imperioso         

 

azul cascada de temblor y espuma

 

Idioma que inunda

 

amor que empapa

 

palabra que comprehende

 

sudor                                                  respiración sin muro

 

azul exclamación

 

de un verso nuevo en los umbrales

 

del mundo hecho de mí

                                   de ti que surges luminosa de las olas

 

que una vez llamamos vida

 

Decir azul

 

y descender a lo más alto

 

 

vivir en la región sin nombre

 

en el ocaso del viento

 

en el poema

 

 

memoria fértil de la palabra viva

 

 

 


 

TEMPORAL

 

Y sigue golpeando el mar

 

contra mis ojos su tiempo

 

Años

 pulverizados

 en                   la                    luz

rostros

encallados

en

el

faro

 

vidas que no fueron                                       y que hinchadas

 

regresan boca arriba                                       y atestiguan

 

el vívido pesar de lo perdido

 

 

Agua                                                  Sal

y                                                         y

vida                                                    tiempo

 

mirada que revolotea el cielo

 

y anuda su destino a mi memoria

 


 


 

YO

 

 

Las aguas que bebieron mis mañanas

 

la brisa fértil cultivando acantilados

 

los parque silenciosos

 

los pinos

                       

las gaviotas    

           

las chumberas

 

la lluvia de los lunes grises

 

los colegios grises

 

el amor cuando el amor es ola

 

 

Todo lo que el tiempo ha escrito en este cuerpo

 

no es más que otro relato legendario del fracaso

 

vida caminando por el mar

 

verso azul con que rimar la muerte

 

 

 

 

PATRIA

 

Nací en esa ciudad sin patria ni cariño

 

que algunos llaman soledad                                                              y otros distancia

 

Nunca entendí de banderas

 

ni le hice caso al profesor de geografía

 

con su mapa político de sueños

 

 

Mi mundo era una isla abandonada

 

rodeada por el mar y los alambres

 

 

Daba igual que fuera el norte                                                no importaba si era el sur

 

 

era el reino despreciado por la historia

 

un castillo hecho pedazos

 

entre nidos de gaviotas

 

 

Mi patria eran las manos de mi madre

 

los ojos sanadores de mi padre

 

un parque                               unos patines                                                   una playa

 

 

Saberse lejos cura la ceguera

 

Ni España ni África ni Europa

 

El viento azul escribe sobre el mar

 

el único relato verdadero

 

un hogar

 

 un amor

 

un cielo idéntico

 

al de todos los hombres de la Tierra

 

 

 

 

 


 

OLA HIRVIENDO EN LA MAÑANA

 

 

Me salvé de morir enredado entre las algas

 

cuando aprendí a olvidar

 

las voces abisales que mordían los tobillos

 

de mi cuerpo joven

 

 

 

Prendido me hice humo

 

ardido me hice nube

 

y lloví hasta volver a los océanos

 

 

Esta forma de vivir

 

que me ha dado el mar y el tiempo

 

carece del grillete de tu lógica

 

 

Salir de mí para encontrarme en mí

           

en esta casa azul

 

donde aprendí a decir mi nombre

 

cuarenta años después del primer llanto

 

 

 

Ni espero ni deseo que lo entiendas

 

mis manos ya no escuchan tus palabras

 

 

Soy como la ola hirviendo en la mañana

 

y hay tanto cielo

 

y tanto mar

 

y tanta maravilla en mi mirada

 

 


 

 José María García Linares. La primera vez que dije "agua". Averso Ed. 2024

No hay comentarios:

Publicar un comentario