MENSAJES DEL MÁS ALLÁ

Quisiera contactar con personas

a las que les interese eso de las comunas,

la antipsiquiatría, las ideas pacifistas

y todo lo que escribió Alan Watts.

Quien esto escribió, hace ahora treinta y cinco años,

es hoy médico en el Hospital Universitario de Alicante

y miembro de una Asociación de Ayuda al Pueblo Saharaui.

Me ronda la cabeza la idea de vivir

en una comuna agrícola rural, para colmo

he leído hace unos días Walden Dos

y me he convencido de que es la mejor forma de vida.

Enviadme información o contactos

para elegir la que más me interese.

Quien esto escribió tiene hoy una empresa de carpintería,

cerrajería y pintura en Barcelona.

Me gustaría ponerme en contacto

con algún grupo ácrata

a fin de que me mandasen

manifiestos, máximas y pintadas.

Quien esto escribió hoy posee una imprenta.

Joven enrollado alcoyano quiere intercambiar pareceres

sobre esta pestilente sociedad que nos corrompe

y ver posibilidades y métodos para fundar

alguna organización anarquista.

Quien esto escribió estudió posteriormente diseño gráfico,

maquetó para la editorial especializada en fascículos RBA

y es hoy responsable del departamento gráfico

de un estudio de diseño industrial de cocinas y cuartos de baños.

¡Urgente! Nos hace falta un tío que tenga cámara para filmar

y que le guste el rollo del cine.

Quien esto escribió es hoy pintor figurativo

y un excelente cocinero en Valldemossa.

Soy un tío al que le gusta dibujar,

no lo hago del todo bien,

pero tampoco del todo mal,

creo que tengo buenas ideas,

tengo que trabajar y me encantaría que fuera dibujando,

si hay algún tío que sepa algo de cómic o chistes

que me lo comunique por favor.

Quien escribió esto aprobó tres años después

una plaza de Auxiliar Administrativo,

hoy trabaja en el INEM

y es delegado sindical de CGT en prevención de riesgos laborales.

Agradecería todo tipo de información sobre la fiesta del sol,

a celebrarse, creo, este año en los Andes.

Quien esto escribió es hoy

un terapeuta especialista en biomagnetismo,

seguidor del Lama Zopa Rimponché,

se convirtió al budismo en 2006.

Soy un alma de 18 eras con grandes ideas

mas están revueltas.

¿Quieres ayudarme a esclarecerlas?

No trates de esconderte muchacha,

percibo tu aura y sé que estás en Euskadi,

transmíteme tus pensamientos

y montemos comuna urbana en Bilbao.

Quien escribió esto sigue interesado por la sociología,

la psicología, la antropología y la astronomía,

es responsable de un departamento de software.

Busco tía para compartir sentimientos

y apearme de este mundo en la primera parada,

comunica todo por carta

pues por culpa de mi grácil figura

o te prendas de mí o comienzas a padecer del corazón.

Quien esto escribió

es hoy manager de un grupo de rock.

Chico de ideas alocadas, aunque no soy Helmut Berger,

no estoy mal, busco nena bien parida

y cachonda (casaderas abstenerse),

para pasar ratos inolvidables.

Quien escribió esto fue guionista de la editorial Bruguera

en los años ochenta y hoy, ya jubilado,

hace fotos y escribe poemas que cuelga en internet.

Buscamos degenerad@s de nuestra calaña

para formar comuna y grupo artístico cultural clandestino

y cachondo en Ibiza, preparamos un verano de fábula.

Tía, si mides 90-60-90 ¿A qué esperas? Apúntate.

Tío, si te gusta el rollo y el porro ¿A qué esperas?

Apúntate.

Quien escribió esto es hoy grafista y dibujante,

se quedó a vivir en Ibiza.

No dejaron rastro, sin embargo,

el que se sentía imperfecto

y quería comunicarse con gente que quisiera comunicarse;

el que quería contactar con tías

para irse en verano hasta la India en autoestop

trabajando por el camino, pintando cuadros en la calle;

el gallego que necesitaba huir del Moloch

e irse a vivir a una comuna

o el que ofrecía una masía para montarla

y luchar así contra el proceso de robotización de la gente;

el que estaba en la mili completamente desmoralizado

y pedía que le ayudaran a encontrar algo bello;

el que necesitaba ampliar sus conocimientos sobre drogas;

el chico de Badalona que buscaba un trabajo

relacionado con el arte donde no lo explotaran;

el pirao de los Black Sabbath que coleccionaba

todo tipo de pósters, fotos y demás fetiches del grupo;

el que grababa cintas piratas de noventa minutos

con lo mejor del rollo a doscientas pelas; 

el que quería comprar el primer disco de la Velvet;

el que buscaba a otras personas interesadas

por la astrología, parapsicología, brujería, ufología

y todo aquello que fuera maléfico, brujo, médium o grillado;

el grupo poético que iba a montar una revista

y necesitaba que le enviaran poemas

y el otro grupo que se llamaba Stigma

y buscaban rock manager

o el tronco automarginado que sin darse cuenta

se había destrozado la vida y que imploraba

que una chica se dignara a mirarle, aunque fuera de Madrid.

Admitía tísicas y desnutridas, las quería a todas, decía,

mido, tras muchos esfuerzos, 1’70,

soy una ganga.

O aquel que pensaba que el mundo

era una gran bola de mierda.

Qué habrá sido de aquellos tres pasaos

a los que les agobiaba la ciudad,

amaban la naturaleza y vivían en las estrellas y los sueños,

pero estaban solos y buscaban compañía

que les ayudara a encontrar la paz natural.

O de aquellos otros tres que se pasaban el día sin hacer nada,

y buscaban tres tías de entre 14 y 16 años

que les hicieran bajar de peso.

O del ejemplar casi extinguido que decía

llevar ya perdidos 17 años estúpidamente

y quería relación con tía como el demonio manda.

Y del que se ofrecía para cunnilingus porque,

aunque era pobre, era un buen jardinero.

O de aquellos dos que se hacían llamar Starsky and Hutch

y querían conocer tías literarias.

Dónde estará aquel joven de 25 años

bueno, trabajador, honesto,

con el porvenir resuelto

-qué inmensa confianza en el porvenir la de algunos-,

que buscaba muchacha de edad similar

y arraigadas virtudes morales

con el fin de fundar un hogar,

y al que no le importaba que la candidata

hubiera tenido ya algún desengaño previo.

Y aquel Aries que quería contactar con féminas liberadas

para gozar sin inhibiciones ni compromisos,

gratuitamente y en privado,

de todas las variantes amatorias posibles.

O aquellos dos cachondos que buscaban rollo con dos tías

y que no pedían que estuvieran muy buenas,

pero que tampoco fueran callos.

Qué habrá sido de aquellos otros dos

que decían ser tíos normales en crisis

y buscaban hembras que pasasen de todo,

aunque eso sí, que todavía tuvieran sentimientos

y que estuvieran preparadas para el “Buen Rollo”.

Y de aquellos tres de Sabadell

que buscaban cabras y cabrones para completar el rebaño.

O el leonés que buscaba hembra portentosa de moral distraída,

andares descarriados, sexo audaz y sediento. Al que no

le importaba tamaño de la hembra, aunque la prefería

de tipo estándar. Abstenerse engendros

con más de dos lunares en el clítoris.

Se ruega rápida respuesta debido a la necesidad agobiante

que palpita en mi falo.

Y el catalán que tenía todos los miembros tensados

ante el único deseo de perforar nenas

aunque fueran muñecas hinchables

o la catalana que pedía guerra

porque estaba harta de bañarse en leche de burra

para calmar el fuego que la consumía

y requería chicos que tuvieran leche de otra clase

para probar qué tal funciona.

O el preso de veintiuno que llevaba cuatro años sin follar

y modestia aparte estoy buenísimo.

Hago un llamamiento urgente

a todas aquellas que deseen auxiliarme

aunque sea moralmente, cosa que desconozco.

Mandarme fotos para masturbarme.

Abstenerse pijas.

Y el que decía llamarse Manolo el Chinito

y era, según él, un virtuoso del colchón

que se ofrecía para sexo con maduras.

No cobro ni un duro, espléndido que es el nene.

Y aquel otro que no sabía si era homófobo o hemofílico

y tampoco se aclaraba si quería follar con una lesbiana

o con una ninfómana porque le faltaba información

y quería perfeccionar su experiencia.

Y del que decía que era una inocente papelera,

 y del que decía que había que encender una luz apagada en el mundo.

Qué habrá sido de la Hermana Oculta de la Luna,

de la Ninfa de los Bosques,

del Volador Incansable, El Goma

o la tasca del Chichi, donde iba la gente del Rollo bueno.

Qué habrá sido de todos ellos,

mendigos buscando el cariño de otros mendigos.

He aquí sus resplandecientes sueños,

su carne de amor y cicatrices, sus escombros

por encima del alto muro del olvido.

Todas estas canciones están aún ahí,

flotando alrededor del mundo.

Cuando respires, respira

y bendice todo lo creado,

yo festejo

vuestra presencia

en la Tierra.

Antonio Orihuela. Cosas que tiramos a la basura. Ed. Amargord, 2012