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martes, 11 de agosto de 2015

7 poemas de ATADO Y BIEN ATADO de J.P.J. "SCOTA"



Vota a la tele

“Si haces caso a los medios de comunicación,
acabarás odiando al oprimido y amando al opresor”
                                                               Macom X


La tela lo exhorta
y no te lo crees,
pero cuando toca,
cuando pasa el tren
por el cielo sucio
del Dios peripé,
con el bucle lleno
de carmín de hiel,
le votas de nuevo.
Votas a la tele,
tu urna secreta,
tu espejo de pana,
tu conciencia plana,
tu patria indiscreta.
Te lavas las manos
como ella te enseña,
te tiras al pozo
si ella te lo ordena,
te apuntas al club
que ella te reserva.
Te labra, te oculta,
te ocupa, te ondea,
te aprieta, te nubla,
te guía, te aventa,
te marca, te muda,
te tapa, te ordeña...
La tele es tu paz,
tu única acera
y no parará
hasta que te vea
renunciando al pan
por una moneda,
cambiando la sal
por una cadena.
La tele te verá
rezándole a ella
en tu noble altar
de plástico y selva
y le invocarás
tu oración más bella
y le votarás
como una promesa.


Opio

“Es más peligroso un pibe que piensa
que un pibe que roba.”
                                     Camilo Blajaquis


Cuando la patria está enferma
la medicina es el fútbol.
Grajeas blancas,
marcas caras,
cuanto más gusto, más bruto.
Desde el balcón de tu casa
ya puedes vomitar tu edema
con el fragor de una rata,
la metástasis del memo
te obliga a cambiar tu cerebro
por dos o tres banderitas
en el ojete de tu ego.
¡Grita!, que has ganado, ¡Grita!
Que has ganado un nuevo impuesto
para pagarle los goles
al rey del estercolero,
a tu club de millonetis,
a tu clan de buitroneros,
a los lustrosos parásitos
que brindan por tu pellejo,
a esos adefesios vanos,
a esos burdos pendencieros
que te asignó tu familia
o la idiotez de tus miedos.
Goles para las patria,
la de los mil agujeros,
triunfos, claxons, cabalgatas;
la religión del dinero
no castiga, ni amenaza
con terrenales infiernos,
aquí marcas tú las cartas
o aquí donas tu cerebro
y unos ángeles de lata
te abren las puertas del cielo.



SOSPECHO



25 de Enero de 2010 en Colombia,
en la Macarena
un volcán de cadáveres
abre su boca, grita,
pero nadie lo escucha.
22 de Julio de 2010, Norma Irene Pérez
toma a los cadáveres por los huesos
y de los agujeros de las balas
los cuelga uno a uno en las estrellas,
pero nadie los ve,
a todos les pilla durmiendo.
13 de Agosto de 2010
el cadáver de Norma Irene Pérez, periodista,
aparece colgado en la luna,
pero sigue siendo de noche.
Sospecho de los paramilitares,
como que es el sol
el culpable de la luz del día;
sospecho de que Alvaro Uribe
se aloja en las ordenes sueltas,
en la órdenes mugidas;
sospecho del silencio cómplice
de Reporteros Sin Frontera
y de todo el ejercito silencioso
de los altavoces de occidente.
Para los fuera del tiesto
no hay corporativismo,
para este caso sólo hay dinero
y el dinero no habla.
Sospecho de los políticos europeos
tan condenados a condenar
las condenas convenientes
y sospecho de cada consumidor
que apreció rapidamente
que la carne de Norma Irene Pérez
era una carne barata,
sospecho por su indiferencia,
la indiferencia que mata.




Tú y sólo tú



No te gusta el mundo
porque esta muy lejos.
No te gusta tu continente
porque hay muchos extranjeros.
No te gusta tu país
repleto de pordioseros.
No te gusta tu ciudad,
ni tu aldea, ni tu pueblo.
No te gusta tu calle
con vecinos tan molestos.
Lo que te gusta es, tu casa
y del trancón para adentro;
el entorno familiar,
eso es lo único nuestro
porque son parte de tí,
tu alboroto y tu silencio.
Vivir, no es vivir afuera,
vivir es vivir adentro
con lo tuyo y con los tuyos,
con el polvo de tus muertos,
aquí nada es importante
sin tus uñas y tus pelos
puestos siempre por delante
de lo justo y lo sincero.
Tú y sólo tú 
y el zaguán de tus secretos
y tu cuarto y tu cama
y sobre todo tu cuerpo:
tu poderosa amenaza,
tu religión, tu gobierno,
tu anzuelo en pié,
tu látigo hambriento
rodeando tus hormonas,
ocupando tu cerebro.
Tu y sólo tú,
desafiando a tu espejo,
compitiendo en el mercado,
arriesgando y venciendo,
como un animal enjaulado
contra sus propios defectos.
Todo lo tuyo es real,
todo lo tuyo va en serio 
y ni en tu cama permites
una arruga sin tu sello.
Tú y tus circunstancias
merodeando en tus huesos
Tú y sólo tú rodeada
por tu esquizofrénico ego.



Símbolos hispanos


(I)

El pícaro tan pícaro y jovial
de tanta picaresca
se presta a enfermedad.
El pícaro es pandemia
agravada con la edad,
atiende sólo al ego
y mengua a los demás
cual presas sentenciadas
al truco de engañar.
El pícaro es jocoso
en trova mediaval,
hoy ya no hay picaresca
sin un blasón falaz.
El pícaro es un judas,
medroso y con maldad,
un espeso maleante
que expele indignidad. 
No se de que se ríen
que gracia les hará.


(II)

Sancho Panza el obediente,
no es tan buena persona,
es un gañán muy dócil
con la sangre plana y gorda.
Es buen acompañante,
un mayordomo en boga,
un suspicaz celoso
y aunque urde luenga escoba,
si no es por un buen bocado
no relega ni la hora.
No aprecia la libertad
si no hirvió en cacerola,
sólo atiende a su barriga,
si se presta: llena y sola.
Apremia la brevedad,
la estulticia le apasiona,
adora por su interés,
al avaro, por las sobras.
Su cara de bonachón
es auténtica si cobra,
si no, arrópense bien,
pan duro, ni en mazmorras.
Su alma no abiene a aventuras,
pura piedra, pura prosa,
se humilla siempre ante el amo,
declina a su espejo esposa
y a su burro no le atiza
porque es él el que lo monta.
Pero no, don Sancho Panza,
usted tampoco me emboba
no me fío del que escusa
y nunca al poder estorba.


(III)

Don Quijote es hoy el loco
de la ONG más redicha,
un activista violento
aspirante a terrorista,
ya lo fue el señor Jesús
y otros puntuales artistas,
cada uno en su episodio
o el que la historia le asigna.
Es un mal uniformado,
incómodo punto de vista,
para los que en sus aposentos
leyes negocian y dictan.
Es un romántico, un tonto,
aborigen socialista,
un anormal entre escombros
de normaleza sandina,
un soñador, un iluso,
un defensor de utopías
contra el pragmático y práctico
muñidor de ergonomías;
un bohemio doctorado
en el liceo inconformista,
el que escapa del rebaño,
el unico que no va a misa,
a la misa del dinero,
la única permitida
en este mercado inmenso
de autómatas y suicidas.
A este don Don Quijote,
si le cedo yo mi asiento,
gorrión y golondrina,
fiel a su renacimiento.     




Recato de la culpa



¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño es un ángel
bajado del cielo,
es pura inocencia,
es un caramelo.

¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño no estaba
cuando eso ocurrió,
no sale de casa
desde que nació.

¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño no estaba
en el sitio del duelo.
Sería otro chico
con su mismo pelo.

¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño es tan puro,
tan guapo, tan listo,
que su inteligenicia
bordea el infinito.

¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño es tan santo,
mi niño es tan bueno
que cada domingo
se viste de nuevo.

¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño va a misa
cuando otros mozuelos
visitan tugurios
insanos y puercos.


¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño y la culpa
no guardan anexo,
son carne y pescado,
son la espuma y el fuego.

¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño levita en mi casa,
no pisa ni el suelo
cuando se desplaza.

¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Mi niño no tiene
ni carne ni hueso,
es agua bendita,
es un alo etereo.

¿Mi niño?
¡Mi niño no ha sido!
Él es el mejor,
el que siempre gana
con gracia y amor.
En todas las canchas
es el campeón,
la gloria divina,
el cid campeador,
el único, el perfecto,
no puede haber dos.
Mi niño es tan mío,
tan propio de Dios,
que él no pudo ser.
Mi niño, soy yo.



Los ninis



No dicen, no oyen,
no hablan, no entienden,
no opinán, no pueden,
no hacen, no quieren,
no exponen, no extienden,
no buscan, no aprenden,
no afectan, no hieren,
no atañen, no hieden,
no incumben, no atienden,
no están, no se mueven,
no notan, no expelen
no pinchan, no duelen,
no cuentan, no tienen,
no creen, no advierten,
no influyen, no ejercen,

no ayudan, no sienten.




J.P.J. SCOTA. Atado y bien atado. Ed. Corona del Sur.
Fotografía de Francecs Catalá Roca.

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