Era ilusoria la idea de que la existencia de graves
riesgos ecológicos determinaría necesariamente cambios en las conductas
mayoritarias. Las grandes amenazas ecológicas (el cambio climático, la
disrupción hormonal, la dispersión de organismos genéticamente modificados,
etc.), están provocadas por poderosos intereses económicos, y para ellos la
forma más provechosa de gestionarlas es ocultarlas utilizando los medios de
comunicación de masas, especialmente si se cuenta con la colaboración de los
gobiernos. Así se ha hecho. El deterioro ecológico local, siempre más visible,
va siendo asimilado por el cuerpo social como un ‘coste del progreso’. Se forma
así un bucle de adaptación cultural que se retroalimenta mediáticamente y se
legitima con el consumo, obteniendo la aquiescencia mayoritaria. La Naturaleza
se va desvalorizando como objeto de interés social, mientras la atención
mayoritaria se centra en otro tipo de objetos o de mitos sociales. Viviendo de
espaldas a la Naturaleza, lo que le ocurra a ésta no es preocupante. (…) El
deterioro ambiental global y local es ahora galopante, y sólo se puede combatir
con mucha propaganda. Puesto que el impacto ambiental es una construcción
social, se puede combatir corrigiendo el problema que lo causa, o bien
modificando la percepción social del mismo…
Antonio Estevan, Riqueza, fortuna y poder, Eds. del
Genal, Málaga 2007.
El librito es accesible en http://www.libreriaproteo.com/electronicos/hilo_dorado.pdf
Citado por Jorge Riechmann en su libro: Autoconstrucción. La transformación cultural que necesitamos. Libros de la catarata. 2015
"Así pues el capitalismo triunfante y sin apenas oposición puede finalmente mostrar su verdadero rostro, su más intrínseca esencia que es la de mantener a la sociedad humana en estado permanente de crisis y depresión hasta acabar con ella."
ResponderEliminarhttp://crisiscapitalista.blogspot.com.es/2015/09/recesion-economica-o-depresion.html