Sentado como una figura de aire
en el desierto de
aire.
Deseo de ti.
Recibiéndome lentamente con la noche
que habita agitando
las temblorosas estrellas.
Y que arriba de mí
te
desea.
VI
Amanece en Erg Chebbi
DESGAJADA la luz en su
resplandor de euforia.
La
lejanía es un punto impreciso
en la inmensidad de estas
arenas.
Se
acercan y alejan voces desconocidas,
gritos que saludan el alba,
quizás temerosos del último día.
Y el gris de la duna somnolienta
se viste en segundos del dorado bronce de la mañana.
Distingo huellas interminables,
como rozadas casi por la levedad
de insectos ignorados,
zorros nocturnos que
sólo vislumbró
el cuarto creciente
de la luna ya ausente.
Espero en el silencio
con las primeras
tórtolas zureando el juego en la arena.
Atraviesan sombras,
luminiscencias,
plenitud de sol para
el día que comienza.
Busco una
iluminación, un rayo único,
una forma en el
horizonte. Y estabas…
Como
el cielo que tomaba posesión
del día y sus horas.
VII
A mis pies les faltan otros pies para la luz de la mañana ...
XII
EL sirope de dátiles se pega a los dedos en su
negror
dúctil, mientras unto el mesmen con mermelada de
higos,
verdecido por la luz que recibe de la ventana abierta.
Se filtran las sombras de
la palmera del jardín polvoriento
y miran las paredes de adobe de la casa silenciosa.
Un fuerte olor a hierbabuena inunda la lengua,
caliente el té que a sorbos lentos se recrea en la boca.
El kiri, queso de cabra, intenso, se mete entre las uñas,
entre la blanca barba, ávida en su boca, que rezuma, incansable,
tisana y zumos de naranjas.
Saciado, un dátil
imperial, tierno, blando, de las palmeras
del oasis de Erfoud, apacigua el cuerpo, como un
niño que descubre su primera palabra, su primera conciencia
del mundo que no termina.
Aquél
que —enamorado— se abre en mil pedazos...
Antonio Ramírez Almanza. Los días lejos. Edt. Cigueña, 2018
Ilustración de Matilde Granado Belvis
...camino descalzo, como la brisa y el polen.
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