Alzado de la rutina
Tiene
siete notificaciones nuevas.
Madres
solteras, padres ausentes
y
niños con llave. Altazor
es
una línea de bajo coste.
Ariadna
ha publicado un nuevo hilo en Twitter.
El
desafío soberanista,
la
reforma constitucional,
tribulaciones
de la clase media.
Pequeñas
mentiras en el Big Data.
Meninas
haciéndose un selfie
en
los baños del instituto.
El
amor es un estado de Facebook.
El
deseo viaja por webcam.
A
veces la conexión falla.
Banco
de recuerdos virtuales.
La
amistad es un algoritmo.
Cambios
en la política de privacidad.
Windows
Abro
y cierro la vida en las ventanas.
Autorretrato
Tengo
1400 seguidores
en
Instagram, 1214
en
Twitter, 3813
amigos
en Facebook y nadie
que
me acompañe esta madrugada
a
lanzar ebrio por las calles
absurdas
proclamas trasnochadas
o
a gritar que todavía te quiero.
Himno generacional
Se
nos rompían enseguida los chándals
y
nuestros padres, que no reparaban
en
gastos, compraban ordenadores
carísimos
que quedaban obsoletos
en
dos años. Poco sacrificio
en
esos años de burbuja inmobiliaria.
Todas
las fiestas eran de disfraces.
Cambiábamos
de todo a la mínima.
Muchos
cambiamos incluso de equipo
de
fútbol, de ciudad, de trabajo
o
de bebida preferida. Seguimos
adelante
sin mirarnos y acabamos
buscando
la sombra en cubículos para fieras.
Acabamos
pasándonos al diésel,
al
pádel y a las drogas de diseño.
Encontramos
vuelos baratos
y
ofertas de telefonía móvil.
Abandonamos
las llamadas para siempre
y
compramos el último CD.
Nosotros
inventamos las series de culto.
Nos
fuimos a vivir al extrarradio
olvidando
que hace falta un refugio
mejor
para escapar de uno mismo.
Nos
llevamos siglos de ventaja.
Posverdad
Toda
la información estará en Internet y sólo cabrán dos posturas: los escépticos,
que no creerán en nada, y los fanáticos, que elegirán una opción y la
convertirán en la verdad.
Alvin Toffler
Todos
los años mueren treinta hombres
asesinados
por sus mujeres.
Pero
eso no se cuenta, claro.
Porque
no interesa.
Miles
de judíos no fueron
a
trabajar el 11-S.
Las
farmacéuticas frenan
la
distribución de curas y vacunas
para
enfermedades varias.
El
descubridor del TDAH
confesó
en su lecho de muerte
que,
en realidad, esa enfermedad
no
existía.
Algún
día se sabrá quién estuvo
detrás
de los atentados de Atocha
y
la verdad no va a gustar a nadie.
Las
vacunas pueden provocar autismo.
La
familia Clinton participa
en
rituales satánicos que incluyen
sacrificios
humanos y pederastia.
El
caso Alcásser fue solo la punta
del
iceberg de una trama de sadismo
dirigida
por altas esferas políticas.
Todo
esto es falso salvo alguna cosa.
La
felicidad paradójica
Sherezade
trabaja en un locutorio
mientras
encuentra algo de lo suyo.
Cree
en el feminismo y le gusta
que
la dominen en la cama.
Lee
sobre todo biografías
y
catálogos de decoración.
Escribe
poemas que luego rompe.
En
ocasiones,
queda
con alguno por Tinder,
ve
telebasura o se masturba
meticulosamente.
Una
vez se enamoró de un chico
hasta
que descubrió que era igual
de
gilipollas que el resto.
Ahora
su estado sentimental
“es
complicado”.
A
veces piensa en hacerse lesbiana
solo
por ver la cara de su padre.
Pero
termina por abrirse un vino
y
mirar fotos de gatitos.
No
recuerda cuándo fue la última
vez
que tuvo una conversación
privada
por teléfono, pero
cuando
va sola por la calle
lleva
siempre los cascos puestos.
En
varios tests de internet le ha salido
que
es moderadamente feliz.
Tampoco
le pide más a la vida.
Ni
al odio ni a la enseñanza
Llegó a donde no se regresa
y volvió porque no tenían piscina
comunitaria. Ganó la guerra psicológica
y arrastró los trienios que le deben
a vivir a un extrarradio alienante,
con su novia y un montón de libros.
Pronto se casaron y divorciaron.
No se dedicó al odio ni a la enseñanza
más allá de lo debido. Castigó
su hígado y sus neuronas,
disfrutó su trabajo con mesura.
Conoció y olvidó buenas personas
y otras que no lo fueron tanto.
Probablemente se quedó más de lo debido.
Ahora pasea por el barrio, es quien espía
los carros de la compra, vive solo,
como debiera hacerlo un fantasma
con smart TV y fibra óptica.
Los antiguos alumnos fingen cariño
al saludarle. A veces les aburre
con viejas anécdotas de discreta
fiablidad. No sabe qué hace
aquí ni por qué hay un plato
que gira dentro del microondas.
Víctor Peña Dacosta. Obsolescencia programada. Aerea, 2019
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