Algunos que mal me quieren
dicen que poco a poco
me fui haciendo mi casita,
el caso es que cuando salí
¡seguía sin ser mariposita!
Algunos que mal me quieren
dicen que poco invierto
en cultura y educación.
¡A mi gente no le falta pan y circo
pues me gasto mogollón
en que se vea basura con forma de televisión!
Niños cantores, graciosos y toreros,
marujas que detallan dolores,
gordos que quieren adelgazar, rocieros
y viejos ligones,
todo es poco cuando hay que blanquear,
entre lo que se lleva el partido
y lo que roban los demás,
enchufes, corrupciones, fraudes, bribonadas,
hay tanto que tapar
que mejor que la tele no deje de funcionar.
Algunos que mal me quieren
dicen que por no trabajar
no he cotizado ni un día
a la Seguridad Social.
Algunos que mal me quieren
dicen que me casé por la iglesia
y en coche de caballos,
lo que nadie dice es que a mi tieso
le dolían mucho los callos.
Algunos que mal me quieren
dicen que odio
a los hijos de Pasionaria,
es normal, Teresa,
qué menos que Andalucía
la gobierne una baronesa.
Algunos que mal me quieren
dicen que muero con la Esperanza,
yo les digo que es la de Triana,
aunque a la otra, en el fondo,
le pondría una peana.
Algunos que mal me quieren
dicen que soy catequista y rociera,
que me gustan los toros y el Betis,
qué queréis, tengo fama de corralera.
Algunos que mal me quieren
me acusan de bodoque
y se quejan de que me regalaran
el título de abogada,
lo que nadie dice
¡es que llevaba diez años matriculada!
Aunque algunos mal me quieren
también hay pelotas y catetos
que con gusto me hacen la cama,
si no das con mi careto,
aquí va mi último quinteto.
Seguidora soy
de Pablo Iglesias, el bueno,
no te parezca cosa rara,
pude haber salido sapo
pero salí rana.
Antonio Orihuela. Camino de Olduvai. Ed. Irrecuperables, 2023
Fotografía de Manuelle Parra
¡Muy bueno todo, Antonio; pero ya el final es me parece excelente!
ResponderEliminarGracias 🙂
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