Con el “Guanchaquito de pecho rojo”
y la “Rosa roja”, del Dúo Arguedas,
voy zapateando de lo lindo por las Españas
y las Europas, mamita linda.
Ya sé que aquí no hay grandes choclos
ni juane, ni papa a la huancaína, ni cebiche
pero qué le hacemos, también tienen sus cositas
como una buena paellita, un gazpacho bien frío
o el mero a la vizcaína que se parece mucho
al mero a lo macho
de verdad, mamita linda,
y si nosotros tenemos nuestra prodigiosa Pachamanca
ellos su jamón ibérico de pata negra
una delicatessen,
mamita linda.
Por la comida no te preocupes
hasta he subido unos kilitos.
Por el idioma tampoco,
mamita linda,
igual nos entendemos, a trompicones
pero nos entendemos.
Aunque al comienzo me daba mucha risa
cuando tenía que decir curro
para buscar una chambita pues,
mamita linda,
o aprender a decir joder
(disculpa la lisura, mamita)
en vez de pucha
ordenador en vez de computadora
nevera en vez de refrigeradora
móvil en vez de celular.
Pero lo que sí ya me ralló ya,
mamita linda,
fue decir U Dos
en vez de Yu Tu
A Ce De Ce
en vez de Ei Ci Di Ci.
Pero ya me estoy acostumbrando
especialmente cuando tomo mi chelita
que aquí le dicen caña
que viene con su tapita
una comidita
que a los españoles les gusta invitar.
¿Qué bacán, no,
mamita linda?
Lo malo es que si tomo muchas chelas
luego dicen que estoy pedo
(disculpa otra vez la lisura, mamita)
y eso ya no me gusta
porque, en verdad, estoy huasca
zapateando de lo lindo, con el Dúo Arguedas,
por las Españas y las Europas,
mamita linda.
Lawrence Carrasco. Amarus & Quimeras. Ed. Ultramarina, 2023
No hay comentarios:
Publicar un comentario