CAMPO DE REFUGIADOS
Como
si una puerta giratoria
abriera
la opción de otro paisaje
arriba
el telón dices
alguna
estrella brillará
en
el escenario
un
dios un abrazo un sueño…
pero
eso no sucederá hoy
nuestro
futuro se diluye hacia atrás
sabemos
que las calles de ayer
y las calles de hoy
nunca
serán las calles de mañana
el
campamento se desdibuja
en
linternas que parpadean y ojos febriles
de
nuevo la casa en tierra de nadie
almohada
diente ratón.
nos
movemos.
CUANDO
TE PREGUNTEN
Los
soñadores resistieron
protegiendo
con sus cuerpos rotos
los
cristales heridos de la memoria
-este no es vuestro país-
y
los que quedaron ¿estarán vivos
o
serán una sombra de otra sombra
entre
los escombros de la noche?
qué
harás
cuando el terror atraviese
cada
latido cada célula de tu cuerpo
del
alma ni se sabe
qué
harás
cuando te pregunten y te digan
así
que huiste así que eres un cobarde
los
cobardes deben morir
y
los soñadores
que protegieron con sus cuerpos rotos
los
cristales heridos de la memoria
también
deben morir
¿te
sorprendes?
para
reordenar nuestro mundo
para
que tan solo nuestras cicatrices
desaparezcan.
***
Zapatos
que descansan en hileras
o
estallan fragmentados por el frío
antes
de romperse en extraños paraísos
de reflectores
o
huyen del modo en que huyen
los
vagabundos de sus recuerdos
entre
estelas de olor a caucho quemado
y
vino agrio hasta la náusea
sabemos
que las fronteras queman
como
espinas en los labios
o
rezan que el cielo descienda
sobre
nosotros
beberemos
el agua de los ríos
y descenderá el maná
como
si nunca hubiéramos muerto
están
los que golpearon las puertas
en
áreas de silencio
de
las estaciones ferroviarias
los
que desataron la ira de los dioses
y
murieron carbonizados
(era fácil rebelarse pero no)
los
que siempre dieron la espalda a la melancolía
y nunca pertenecieron a nadie.
***
Y
ahora
¿sorteamos
boletos para apagar la memoria?
¿desvanecemos
el mandala
para
paliar inyecciones de dolor
o
giramos
como derviches desnudos
desafiando
los nervios de lo prohibido?
¿cómo
escriben sus apellidos los mercados?
¿será
posible de nuevo el shirtaky en Grecia?
¿tienen
la culpa de todas las rebeliones
los
escaparates?
¿quién
pone de nuevo la piedra
en
la honda de David
sin
que suponga una estrella?
¿dónde
firmo tu sentencia de muerte
dónde
lavo mis manos
dónde pongo mi voz?
***
SI
PUDIERAN DANZAR
La
gran luna llena de agosto se acaba.
Mira
cómo la arena escupe su propio polvo.
(coro) Quisimos ser alzadas en la orilla
en la que permanecen despiertas las palomas
lejos de la voz de mando de la locura
en la zanja en la que fuimos atraídas
por el olor de la pólvora.
Se
morían ellas y yo no estaba
sólo
hurgaba en mi propio vacío.
Si
pudieran danzar … el sol se posaba ligero
sobre
los hombros
sobre
los vientres azuzaba ráfagas de fuego.
Pero
el odio no oculta su cuchillo
y
busca el camino del humo para perpetuarse
lo
cuentan los coyotes lo cuentan los las estrellas
lo
cuentan los silencios.
Alguien
pregunta si no es que dormimos
sobre
un cúmulo de ausencias y fosas comunes
la
noche lo cubre todo
zanjas
y más zanjas
un
juego macabro de ganancias y pérdidas.
(coro) Quisimos ser alzadas en la orilla
en la que permanecen despiertas las palomas
lejos de la voz de mando de la locura
en la zanja en la que fuimos atraídas
por el olor de la pólvora.
Habría
que seducir a la serpiente
bajo
los cimientos de un sueño colectivo
y
encender las antorchas
aunque
la víbora muerda bajo la lengua
y se
alce bajo un cielo ensangrentado
no
sumar desolaciones a la tristeza
¿qué
hemos hecho con la vida?.
Si
pudieran danzar … hacia dónde
dirigirían
sus cabezas los cuerpos apilados
los
adioses congelados al borde del olvido.
(coro) Quisimos ser alzadas en la orilla
en la que permanecen despiertas las palomas
lejos de la voz de mando de la locura
en la zanja en la que fuimos atraídas
por el olor de la pólvora.
***
RECONSTRUCCIONES
El
insomnio cae a plomo sobre la tierra
como
si la gente no tuviera que dormir
suspendidos los sueños
ayer
antes y después
la
guerra
tras
la guerra de los muyahidines
en
las colinas de Zanabad
manos
viudas levantan paredes de adobe
contra
el desamparo
los
golpes se multiplican
el
barro y el agua se multiplican
yo
soy la mujer que levanta una ciudad
frente
a las prohibiciones
solo
arena encontrarás en mis labios
me
llamo Bibikoh la del cuenco vacío
ojo cercenado por la metralla
soy
la mujer que intuye el olor del jazmín
entre
los escombros
atravesada
por el brillo de mi único ojo
trazo
coordenadas por encima de los acantilados
yo
soy la voz usurpada de las mujeres sin boca
soy
la hija de la reconstrucción de todas las guerras
Bibikoh
me llamo.
***
LA
ALAMBRADA
Lo
hermoso no necesita disfraz
buscar
la puerta o resolver el enigma
con
el que otros
hubieran
podido atravesar
-fatídica atracción-
el
metal infranqueable
destello
de la alambrada que vigila
más
allá del extrañamiento
o
los designios de los pequeños dioses
lo
hermoso no necesita disfraz
abrir
los ojos a la certeza
de
que este país
río
o gangrena de su sangre
también
les pertenece.
Isabel Hualde. Reconstrucciones. Ed. Vitrubio, 2017