...pocas pistas habían quedado sobre él, en España prácticamente un desconocido... Ediciones Idea está sacando a la luz su obra poética completa, de la que hasta ahora han aparecido los 11 primeros volúmenes, entre ellos, claro, el tan sorprendente como interesantísimo Campo nublo...
Aunque nació en Las Palmas de Gran Canaria en 1925, Antidio Cabal huyó de España -que no emigró- a sus 23 años en una embarcación clandestina con rumbo incierto a América. En Venezuela se licenció en Filosofía. Fue prologuista de las primeras obras de Ernesto Cardenal, una amistad que lo vinculó con el apoyo clandestino al movimiento sandinista. Al cabo de los años se asentó en Costa Rica, país en el que se jubiló como profesor de universidad.
Antidio, ¿cuáles serían sus mejores palabras de presentación para los que no tienen ni idea de quién eres?
-...me presento como un individuo sorprendido de estar siendo recibido por otros...
- ¿Cómo hemos de entender el abandono de España a sus 23 años?
- Yo soy -ya lo indiqué hace años- un huyente como persona, como individuo, como miembro de mí mismo... De joven yo creía que huía de situaciones y estados y substancias (del franquismo, del servicio militar, de los estudios, de amistades, de estructuras familiares, etc.), pero luego me di cuenta de que yo huía porque huir constituía una determinación sine qua non, es decir, que yo carecería de mí mismo. No es un drama, es una función. Únicamente me detengo cuando escribo. Termino de escribir, amontono, descanso, y reemprendo el movimiento. Huir pareciera ser la parte más importante de mi código genético, así ontológico como biológico. He vivido abandonando ciudades, casas, trabajos, emociones, de compromisos con el ser y el estar. Eso es lo que hace un río.
- ¿No es para usted la escritura un acto solemne, algo sagrado, como suelen reconocer muchos poetas?
- Comer, dormir, pensar, caminar, sentir sed, bañarme, ser animal humano y gas humano no están imantados por ningún hervor, por ninguna fiebre ´creadora´, por un omniconductismo de mi necesidad de escribir: no paso de ser en ello un radioescucha obligado, en determinados lapsos laborales en que me veo empleado en escribir poemas. Pasado el rigor, la fuerte anormalidad, sigo viviendo vulgarmente como viven todos, sin que el espíritu y su literatura intervengan en mi mecanismo determinantemente existencial… Para explicar qué tipo de poeta soy necesito ser informado por alguien que no sea yo. Mi espejo no me enseña el fondo de mi forma.
-...no es habitual que un escritor, y mucho menos un poeta, mantenga durante tantas décadas su obra guardada bajo llave, cuando todo el mundo se desvive por publicar…
- Escribir y no publicar lo necesitaba, me bastaba la exudación: necesidad cumplida. No presumo de ello: simplemente me ocurría. Si me hubiera muerto, yo habría quedado cumplido. De todas maneras, la poesía no ha pasado de ser en mí -en alta medida- un sentido más, y publicarla, dejarme fotografiar… Ahora estoy en pose.
- ¿Cuánto le debe su poesía a la filosofía griega?
-... la maravilla de ser notificado de que el hombre, el animal y la planta participan de una misma y común mente-psique-sensibilidad me hizo salir de toda la axiología de parroquia, de todas las sacristías de la razón revelada.
- Entendiendo que la edición completa de su poesía que he preparado para Ediciones Idea la presento dividida claramente en dos "modalidades distintas" (Lírica del Yo / Lírica del Nosotros), ¿cabría pensar que desde tu perspectiva existe una poesía "inútil" y otra "útil"?
- Bueno, como sabemos -si no todos, sí los necesarios- no existen poesía inútil y poesía útil como tal, que son conceptos de valoración -de fuerte olor ideológico- ajenos a la verdad de la poesía. O hay poesía en un poema o no hay poesía en un poema, independientemente de que se trate de un poema de la "Lírica del Yo" o de la "Lírica del Nosotros", que no pasa de ser una formulación y división pedagógicas adjetivales -que tú has encontrado para ordenarla- pero no substantivas… Recordar que en la poesía entra todo.
- Por favor, escoja para terminar un poema de Campo Nublo
El amor me engaña cuando no me convence,
el amor me engaña cuando me convence,
el amor me engaña cuando existe.
ANTONIO JIMÉNEZ PAZ. Fragmento de una entrevista a Antidio Cabal publicada en el periódico La Opinión de Tenerife el 18 de mayo de 2009: http://www.laopinion.es/
FRAGMENTOS DE LA RESEÑA Del colectivo Addison de Witt sobre CAMPO NUBLO: http://criticadepoesia.
El libro que presentamos, "Campo nublo", de 1956 y
reeditado en 2008, del casi desconocido Antidio Cabal (sin foto
disponible en Internet), treinta poemarios escritos, nacido en 1925, y
completamente olvidado por el oficialismo crítico y mediático, es un
caso ejemplar de lo que llevamos aullando desde hace tiempo en este
blog. Hay una terrible pereza mental por parte de la crítica oficial y
oficiosa, y también por parte de buena parte de los poetas oficiales.
Hay,
en general, pocas ganas de salirse de los campos marcados por parte del
oficialismo.
Y
así, gente como Millares Sall o como el propio Antidio Cabal, que
destrozan todos los pre-juicios sobre la generación de post-guerra y la
comodidad de manejar dos o tres grupos, resultan puestos al margen en
favor de otros poetas que se llevaron muy bien con el franquismo, o que
entraron en los círculos de referencias cruzadas o, en unos pocos casos,
que eran muy buenos. Pero fuera de los cánones ultraconservadores se
deja a parte de la poesía de los últimos 50 años, y se comienza a hacer
porque su historia ya está, supuestamente, contada, es lineal y fácil de
aprender y estudiar. Su inclusión obligaría a trabajar y rehacer la
historia escrita por todo este grupo crítico tan prescindible como lo es
una parte importante de la poesía en la que centran sus estudios.
Acabada
la perorata, vamos al libro de Antidio, que ya fue publicado en 2000, y
vuelve a ser publicado ahora en un esfuerzo editorial sin precedentes
de Ediciones Idea para dar a la luz los 30 libros que este señor ha
escrito. Agradecemos a Antonio Jiménez Paz el esfuerzo que está
realizando de divulgación y difusión de la obra del poeta canario.
"En torno a nada, no descubriendo, sino después, entre poemas."
En
definitiva, un libro que no pocas veces llega a ser brillante en lo
formal y en su contenido, que podría rescatar a un poeta grande de
nuestra poesía si se confirma en el nivel del resto de su poesía, algo
que desconocemos, un poeta absolutamente olvidado y marginado por el
establishment, que sigue en la órbita del conservadurismo a ultranza que
ha poblado buena parte de la crítica y poesía mediática de los últimos
25 años.
Valoración de "Campo nublo": 7,5 / 10