RECÓRTAME, amor, un cielo para todo esto,
más allá de la espiral confundida y la ausencia,
porque poca poesía hay en los charcos de las calles
y en los mendigos más mendigos del mundo.
Antonio Orihuela. Madera de un solo árbol (Cuaderno de Nepal). Ed. Delirio, 2014
Qué buenísimo, Antonio; y después no quieres q t diga que eres un gran poeta
ResponderEliminarIncluso tras los pozos secos se intuyen corrientes de agua.
ResponderEliminarChiloé