Súbitamente
El ruidoso
ensamble
de consagrados
poetas,
fue interrumpido
por el
penetrante olor
a sándalo
despertándolos,
haciéndoles percibir
acaso por vez
primera
el mundo que les
rodea.
El planeta giró
una vuelta demás,
y los polos
magnéticos
rotaron a la
línea ecuatorial.
El zumbido de
una abeja solitaria
los infectó
enfermándolos de
conciencia.
Súbitamente.
A LA MIERDA
No venga nunca
más con esa mierda
de que no puede cambiar el mundo.
¡Mírese nada
más!
Corazón de
harapos
Su cerebro, un
muladar
de creencias
tóxicas,
sus brazos
y piernas
siempre
obedientes
al tam tam
de la lucha por
la existencia,
así llaman ahora
al suplicio de
Tántalo,
pedalear sin
parar
y sin sentido
dentro una caja
de Skinner.
Si usted me dice
que no se puede
cambiar
el mundo,
y ni siquiera
vale la pena intentarlo,
ya sabe dónde se
encuentra la puerta de salida.
¡Jódase!
ORTOPEDIA CEREBRAL
Quiero enseñar a
mi cerebro
a caminar por sí
mismo
librándolo de la
ortopedia mental
que lo
constriñe.
Caminar así es
riesgoso,
puede tropezar
y levantarse
una y otra vez,
estaré ahí para
ayudarle.
Le señalo la
ruta,
conducente
a la orilla del
abismo
por el cuál
puede caer
en la verdad
profunda de las cosas.
Manuel Martínez Morales. Inéditos
Without money we'd all be free.
ResponderEliminar