documentos de pensamiento radical

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jueves, 12 de abril de 2018

CALLEJÓN DEL GATO GÓMEZ DE LA SERNA/VALLE-INCLÁN/ORIHUELA

Ángel Pasos. Street Photography



EN EL CALLEJÓN del Gato, hubo hasta hace poco, calzados en la pared y del tamaño del transeúnte de estatura regular, dos espejos, uno cóncavo y otro convexo, que deformaban en don Quijote y Sancho a todo el que se miraba en ellos.


Ramón Gómez de la Serna. Biografías completas. Aguilar, 1959.


Nota de 1905



MAX: ¡Don Latino de Hispalis, grotesco personaje, te inmortalizaré en una novela!
DON LATINO: Una tragedia, Max.
MAX: La tragedia nuestra no es tragedia.
DON LATINO: ¡Pues algo será!
MAX: El Esperpento.
DON LATINO: No tuerzas la boca, Max.
MAX: Los ultraístas son unos farsantes. El esperpentismo lo ha inventado Goya. Los héroes clásicos han ido a pasearse en el callejón del Gato.
DON LATINO: ¡Estás completamente curda!
MAX: Los héroes clásicos reflejados en los espejos cóncavos dan el Esperpento. El sentido trágico de la vida española sólo puede darse con una estética sistemáticamente deformada.
DON LATINO: ¡Miau! ¡Te estás contagiando!
MAX: España es una deformación grotesca de la civilización europea.
DON LATINO: ¡Pudiera! Yo me inhibo.
MAX: Las imágenes más bellas en un espejo cóncavo son absurdas.
DON LATINO: Conforme. Pero a mí me divierte mirarme en los espejos de la calle del Gato.
MAX: Y a mí. La deformación deja de serlo cuando está sujeta a una matemática perfecta. Mi estética actual es transformar con matemática de espejo cóncavo las normas clásicas.
DON LATINO: ¿Y dónde está el espejo?
MAX: En el fondo del vaso.
DON LATINO: ¡Eres genial! ¡Me quito el cráneo!
MAX: Latino, deformemos la expresión en el mismo espejo que nos deforma las caras y toda la vida miserable de España.
DON LATINO: Nos mudaremos al callejón del Gato.

Ramón del Valle-Inclán. Luces de Bohemia, escena XII. Semanario España, 1920.

Anuncio de 1841


CALLE ÁLVAREZ GATO, MADRID

Han huido los héroes clásicos
de la taberna Pompeyana,

solo queda
en el espejo cóncavo
mi reflejo,

borroso y absurdo,

como el ojo que mira
a través de un vaso vacío.

Hace frío, tocan campanas negras,
la calle, húmeda, azul y lívida,
es incapaz de contar la tragedia.

No estás a mi lado,
no sé a dónde caminar,

¿por qué, para qué volvemos?


Antonio Orihuela. Disolución. El Desvelo, 2018.


El Liberal, 1896

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