(Lucebert, '82)
coro:
ajeno al mundo arrastrado hasta
dentro del mundo
goteando aún pero ya en el primer
rastro
aterrorizado por sombras de un régimen
de terror
que con dientes rechinantes se
deslizan en el trópico de los relatos
o van de caza por montes y valles
atravesando angustia cual fuego bajo las
axilas
y una brecha burlesca en la espalda
el babeante hocico del propio
trasto anticuado
vivir es a veces leve
pero con más frecuencia con dolor
negro
tapar un agujero
en la negligencia
solo curiosidad y asombro
roen de vez en cuando pequeños
agujeros en el huevo
que pone cada gran vivencia
un recuerdo terco y obstinado
Lucebert, CONSUELA
AL ROBOT HISTÉRICO, Oratorio, 1989
(Traducción del neerlandés: Agustín B.
Sequeros, marzo, 2015)
Magnífica traducción, Agustín, de una audaz cascada de metáforas no fáciles. Enhorabuena.
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